miércoles, noviembre 14, 2007

Recuerdos de una noche inolvidable: martes 13 de noviembre del 2007, Vértice del Museo de la Nación

Ayer se hizo realidad uno de mis sueños. Björk Guðmundsdóttir pisó el escenario del Vértice del Museo de la Nación a las 9:10 p.m. del martes. Una semana antes de que la cantante cumpla 42 años, 4 mil personas recibimos el regalo de nuestras vidas: una artista entregada en voz, cuerpo y alma.


Nos sorprendió desde el inicio, sobre todo a aquellos que buscamos los últimos set list que la islandesa había desarrollado en Santiago (el sábado 10 en el estadio San Carlos de Apoquindo) y en Buenos Aires (4 y 7 de noviembre en el Gran Rex). En Lima, Björk entró con todo: dejó The Anchor Song para el final y arrancó, potente, con la marcha de Earth Intruders y luego Hunter (la primera de las 6 que toco del Homogenic, 1997).
Las diez gringas encargadas de los vientos (Björk las bautizó como las “Wonder-brass”) la rompieron desde el inicio. El público ya estaba entregado y algo ronco para la tercera de la noche, la bella Cocoon (única canción del Vespertine, 2001, que incluyó en el concierto), en la que se pudo apreciar el encomiable trabajo sonoro de los otros tres músicos en escena (y, claro, el de sus Mac).
Con Pleasure Is All Mine empezó una parte del recital que Björk dedicó para interpretar, con variaciones, un grupo de canciones correspondientes al experimental Medúlla (2004). Una emotiva Joga también se coreó durante estos momentos.
Después de que Army Of Me (primera de las 3 que tocó del Post, 1995) moviera las cabezas de todo el recinto, y de Innocence (de las mejores de Volta, 2007), Björk, que hasta el momento solo se había dirigido al público con algunos “gracias”, increpó a los muchos que, sin respetar las advertencias que se hicieron antes del concierto, acribillaban con fotos a la diosa islandesa. “¡I don’t wanna see cameras, I wanna see your faces!”. A partir de ese momento, las pantallas luminosas desaparecieron.


Björk encantaba con su inigualable voz a un gentío que la miraba absorto. Frente plateada, malla de largarto y túnica multicolor; la cantante, entre canciones, se inclinaba, tomaba de un vaso e ingería algo usando una cuchara. Bailaba como una niña introvertida pero pendeja, a veces abría la boca como un tigre y soltaba un tono imposible, saltaba y movía las manos como abanicos, iba de un lado a otro y los espectadores levantaban los brazos para intentar el milagro de tocarla o simplemente para intercambiar una mirada repentina.
Bachelorette fue monumental, I Miss You armó el tono. El vértice de la cultura se llenó de saltos con Hyper-Ballad (lo mejor de la noche) y el vibrante estruendo electro-punk de Pluto. Luego, los artistas volvieron a los camerinos y el público coreó algunos minutos “chiiina, chiiina” y un poco ortodoxo “olé, olé olé olé, Bi-ork, Bi-ork”.


La islandesa apareció con algunos gestos extraños en la nariz y, como seguramente se le había resecado la boca, se lamía los labios como un gato después de tomar su leche. Todo el vértice cantó The Anchor Song.
La fiesta terminó arriba, en las estrellas. Con el grito de “Que viva la revolución”, Björk y las Wonder-brass se despidieron, luego de hora y media, con una inolvidable interpretación de Declare Independence, el devastador corte de Volta, mientras el papel picado volaba entre miles de saltos y los gritos de "raise your flag! Higher, higher!"
Gracias Björk por una noche inolvidable.

Set list:
1. Earth Intruders
2. Hunter
3. Cocoon
4. Pleasure Is All Mine
5. Joga
6. Who Is It
7. Desired Constellation
8. Army Of Me
9. Innocence
10. Bachelorette
11. I Miss You
12. 5 Years
13. Unravel
14. Wanderlust
15. Hyper-Ballad
16. Pluto
17. The Anchor Song
18. Declare Independence


Introducción

Earth Intruders

Parte de Hunter

Final de Declare Independence

Fotos y videos: Julio Pérez Luna y Diana Zapata

Lee también: La visita del año (PRIMICIA NACIONAL) y Bjork en Lima (emepitri).

lunes, noviembre 12, 2007

Esperado regreso: The Raveonettes – "Lust, Lust, Lust"

En el último texto que publiqué en RAN-KING, Los mejores discos año por año (2000-2006), califiqué al Pretty In Black de los Raveonettes como el mejor disco del 2005 y no pude ocultar la gran expectativa que sentía por la aparición del nuevo material de esta fantástica banda danesa. Bueno pues, poco después de escribir el mencionado post busqué un poco por la Internet y me di con la sorpresa de que el grupo preparaba nuevo material para fin de año. Ahora me alegra anunciar que la espera terminó hoy. Sí, hoy, 12 de noviembre del 2007, se editó en Europa Lust, Lust, Lust, el tercer disco del grupo de Sune Rose Wagner y Sharin Foo.



Como la banda acaba de firmar con Vice Records para la edición norteamericana del álbum, y, por lo tanto, recién podré adquirir este nuevo material vía Amazon (probablemente) en marzo, busqué nuevamente en la red y encontré un blog muy recomendable y mejicano (rincondelmike.blogspot.com) en el que pude bajarme, antes de su publicación tangible, la reproducción en mp3 de las 12 canciones que forman este lujurioso (por tres) producto sonoro. Maravillas de la era digital que le dicen.


De Dinamarca con amor

Siempre he pensado que para apreciar, opinar y, en este caso, escribir sobre un álbum, primero uno debe escucharlo durante una buena cantidad de tiempo. Al ser la música un fenómeno estrechamente ligado al tiempo, es, como éste, cambiante y su interpretación se fortalece con el recuerdo.
Hace un par de días que vengo escuchando, como loco, esta nueva joya del dúo danés, sin embargo, ante la necesidad de publicar una noticia importante en este blog venido a menos, he de arriesgar algunos pocos y apresurados comentarios sobre el disco.
El sonido nos remite, sorpresivamente, al primer disco de los Raveonettes, Chain Gang Of Love (antes la banda sacó un sensacional EP, Whip It On), sin embargo las melodías están más ligadas a la placa anterior, Pretty In Black. Ahora más que nunca, la desolación y el baile se complementan de forma mágica.
El disco empieza con Aly, Walk With Me; un riff, que suena a lo más oscuro de Depeche Mode, acompaña la misteriosa voz con eco. Finalmente la canción se descarrila en una puntiaguda ola de distorsión. Sin duda un poderoso inicio (más fuerte que los comienzos de los dos discos anteriores), que se amalgama a la perfección con lo que sigue: la expectante Hallucinatios y Lust, canción que parece arrancada de la ya mencionada Aly…
El gancho pop esta vez le pertenece a Dead Sound, fabuloso cuarto track que seguramente será el primer single (sin embargo, auguro que no sonará más que That Great Love Sound o Love in a Trashcan). Luego sigue Blush, tal vez el mejor momento de Lust, Lust, Lust. De ahí en adelante toda la emoción se va para arriba.


You Want The Candy en vivo


En general, las guitarras del disco pasan a través de las texturas sonoras a lo Sonic Youth y My Bloody Valentine, mientras las canciones son más nuevaoleras que nunca, sobre todo en la super bailable You Want The Candy (no me la puedo sacar de la cabeza) y With My Eyes Closed. Los ritmos tienen el alma del rock and roll de Buddy Holly, del surf rock de The Ventures (Blitzed) y de las baladas de The Ronettes (Sad Transmission).
Lust, Lust, Lust, cuyo título habría que interpretarlo como una sobreexcitación divertida y tierna a la vez, es el disco en el que más destaca la voz de la rock star más blanquiñosa del planeta, Sharin Foo. La sobria instrumentación del álbum acompaña de manera perfecta los pasajes del disco. Incluso, por momentos a uno le provoca contemplar el silencio entre los sonidos. La monumental y melancólica The Beat Dies, es el mejor final para uno de los mejores discos del año.
Sin duda, un paso adelante de una de las grandes bandas de la década.

Lista de canciones:
1. Aly, Walk With Me
2. Hallucinations
3. Lust
4. Dead Sound
5. Black Satin
6. Blush
7. Expelled From Love
8. You Want The Candy
9. Blitzed
10. Sad Transmisson
11. With My Eyes Closed
12. The Beat Dies